Caleidoscopio: Reseña de ‘The crown’, temporada 5

Caleidoscopio: Reseña de 'The crown', temporada 5
Por supuesto que hay muchos episodios que sobresalen en esta quinta temporada.

Columna #50 | Caleidoscopio por Miguel Parpadeos
Instagram / Twitter: @miguelparpadeos

Si pensáramos en todos aquellos momentos políticos y sociales que causaron un impacto en la década de los noventa, uno de los más relevantes hasta hoy en día es el escándalo matrimonial entre el príncipe Carlos de Gales y Diana Spencer. La pareja de cuento de hadas entró en quiebre y, con ello, causó fuerte fisuras en la imagen ya en declive de la monarquía. Este periodo histórico es explorado en la temporada cinco de The Crown en Netflix.

Como es costumbre en la producción del director y guionista Peter Morgan, el relato televisivo de la reina Isabel II hace un cambio cada dos temporadas para reflejar las distintas etapas de su vida, el cual se ve reflejado principalmente en el elenco. Las primeras dos temporadas fueron protagonizadas por Claire Foy, quien interpretaba a una joven reina que tuvo que asumir el cargo de forma inesperada y se tuvo que abrir paso como mujer dentro de la política. Posteriormente, la actriz ganadora del Oscar Olivia Colman fue la encargada de seguir con el personaje en las temporadas tres y cuatro para mostrarnos la etapa de adulta, donde tuvo que lidiar con los cambios sociales y los asuntos familiares relacionados con sus hijos.

La actriz que ahora está a cargo de llevar la historia hasta su conclusión es Imelda Staunton, quien es conocida por su participación en las cintas El secreto de Vera Drake, Pride y Harry Potter y la Orden del Fénix. La etapa que explora su versión de la reina es la vejez, la imagen más recordada de esta figura política.

En los episodios de esta quinta temporada se explora la fuerte crisis que enfrenta la corona desde varios frentes. En el político, la reina Isabel II se percata que ella misma, sus ideales y su gobierno parecen no encajar con la sociedad y los cambios tecnológicos. Se percibe añejo y ajeno a lo moderno. En lo íntimo, se enfrenta a los escándalos de los miembros de la familia, donde el más público y recordado es la ruptura de Carlos y Diana.

Esta pareja es ahora interpretada respectivamente por Dominic West, un excelente actor que, por desgracia, decepciona en esta serie, luego de la excelente actuación de Josh O’Connor en su etapa de juventud; y por una Elizabeth Debicki, quien se camuflajea como Lady Di de una manera tan natural que no deja de sorprender en cada una de sus escenas. Sin duda, su participación en la temporada es uno de los mejores aciertos de la producción.

Esta nueva y última etapa de la serie se siente diferente a las anteriores, algo que varios espectadores han atribuido a un ritmo lento o que las historias contadas resultan aburridas. Si bien la serie sigue brillando a través de episodios donde vemos a la reina enfrentándose a situaciones políticas o la historia se enfoca en otros miembros de la familia, Isabel II se siente menos presente. La trama de Carlos y Diana se vuelve un foco tan importante, que la reina se convierte más en un personaje secundario en la propia serie de su vida.

Elizabeth Debicki se camuflajea como Lady Di de una manera tan natural que no deja de sorprender en cada una de sus escenas. Foto: Keith Bernstein/Netflix

Lo peor de todo es que el recuento histórico de esta temporada es uno tan sonado y tan recordado, que muchos eventos de la pareja no son profundizados o son abarcados de una manera superficial. Además, a pesar de que los personajes hablan de la crisis que enfrentan, la temporada cuenta muchos de los eventos con poca tensión y dramatismo.

Aunque la serie ha intentado mostrar a los personajes históricos a través de sus claroscuros, es imposible no pensar que el retrato de la familia real en estos nuevos episodios es un poco más amable, en especial, con el príncipe Carlos. Tan solo en la cuarta temporada nos mostraba la conclusión de uno de los primeros encuentros de Diana y la familia real con un tono un poco siniestro, y al propio Carlos siendo mucho más agresivo y confrontativo en cuanto a su relación con Camila Parker Bowles. Todo esto se desaparece. Hasta por un momento uno pensaría que la serie busca ser más gentil con la imagen de Carlos ahora que él se convirtió, este año, en el nuevo monarca de Reino Unido.

Por supuesto que hay muchos episodios que sobresalen en esta quinta temporada. Uno de ellos es cuando Isabel II se confronta con la búsqueda de los cadáveres de los Romanoff, debido a que el zar era parte de su familia, al ser el primo de su abuelo Jorge V, y otro es cuando Diana Spencer acepta hacer una entrevista para hablar sobre su matrimonio, el cual nos da un vistazo al cambio tecnológico de la televisión y de la propia BBC.

Asimismo, la temporada sigue el desarrollo planteado de otros personajes de la familia real como el príncipe Felipe, quien en esta temporada es interpretado por Jonathan Pryce. La actriz Lesly Manville es quien ahora toma el papel de la princesa Margarita, y su episodio es igual de memorable como los anteriores que fueron protagonizados por Vanessa Kirby y Helena Bonham Carter.

A pesar de que la quinta temporada de The Crown es una de las más débiles, la serie sigue siendo ese diamante del catálogo de Netflix que no deja de resplandecer. Falta una temporada más con la cual cerrarán la historia. Aunque el productor Peter Morgan había declarado en múltiples ocasiones que la serie no cerraría con los eventos actuales, uno espera que tal vez reconsidere luego del fallecimiento de la reina Isabel II este 2022, evento con el cual podría contar por contar en su totalidad la vida de esta monarca.

Tráiler de ‘The Crown’, temporada 5.

Sé el primero en comentar

Dejar una contestacion

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.


*