Columna #59 | Caleidoscopio por Miguel Parpadeos
Instagram / Twitter: @miguelparpadeos
Después del sorpresivo éxito que tuvo la serie Hearstopper en Netflix a mediados de 2022, Nick y Charlie regresan un año después con una segunda temporada, la cual adapta el tercer volumen de las novelas gráficas de Alice Oseman. Esta nueva historia muestra los nuevos retos que enfrentará esta pareja de adolescentes, conoceremos más sobre su grupo de amigos e incluso los seguiremos en un viaje escolar a París.
La ternura en la relación de Nick (Kit Connor) y Charlie (Joe Locke), así como todos momentos emotivos y reconfortantes, fueron el principal gancho que encantó a miles de personas alrededor del mundo. No obstante, una de las principales críticas que tuvo la primera temporada fue que la dulzura de la serie era tanta, que idealizaba los romances LGBTQ+ y que invisibilizaba los problemas que viven los miembros de esa población.
Los nuevos episodios mantienen el tono de los anteriores, aunque se ahondan más las historias de los personajes y la serie nos permite descubrir que no todo es color de rosa entre las animaciones de hojas cayendo y chispas de colores.
Uno de los principales temas en la segunda temporada es la salida del clóset a través de los diversos personajes. Nick y Charlie, quienes ahora son novios, desean gritar a los cuatro vientos el cariño que se tienen; sin embargo, se darán cuenta que temen al qué dirán y a las repercusiones que pueda tener en sus vidas mostrarse como pareja de manera pública.
De manera individual, Nick no encuentra la manera de abrirse con el resto de su familia y compartirles que es una persona bisexual; y Charlie sigue arrastrando las heridas del bullying escolar que sufrió cuando la gente se enteró que le gustaban los chicos.
A través de todos estos conflictos, la serie contrapone los problemas que tienen las adolescencias LGBTQ+ en sus procesos por aceptar su orientación e identidad sexual, y todos lo que tienen que hacer para poder encontrar su felicidad.
Uno de los puntos más importantes en la segunda temporada es un viaje a París que realizan los personajes por parte de su escuela. Grabada en la ciudad francesa, los veremos explorar locaciones importantes como Montmartre, la Torre Eiffel e, incluso, las diferentes salas del Louvre. Además de mostrar estos lugares, los personajes confrontan sus conflictos y nos ofrecen momentos románticos entre ellos.
Quienes hayan seguido la historia a través de las páginas de la novela gráfica, se encontrarán con nuevas sorpresas. Al igual que la primera temporada, la versión televisiva desarrolla en mayor medida las tramas secundarias. Sin embargo, en esta ocasión lo hace mucho más y, en lugar de perjudicar, le beneficia a la serie. Tara y Darcy son dos de los personajes que conoceremos de forma más profunda y que sorprenderá a varios el trasfondo que vive una de ellas.
Entre todas las producciones juveniles que ofrece Netflix, Heartstopper confirma que es una de las nuevas joyas, tanto por la calidad en la dirección y actuación, como en el cuidado que tiene para escribir las historias de todos estos personajes. Aunque se ha confirmado una tercera temporada, y tendremos que esperar más tiempo para su llegada debido a la actual huelga de guionistas y actores en Hollywood que ha pausado a toda esta industria del entretenimiento.
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